Luz InCorporada , La Historia, Capítulo 6
Puedo escucharte preguntar: “¿Qué quiere decir cuando dice eso de que ‘escucha mensajes’? ¡¿Cuál es esa historia de ser guiada, dirigida y mandada por los ‘guías espirituales’?!
Ha llegado el momento de contarles sobre mi conexión de toda la vida con seres de Reinos superiores.
Nací viendo y escuchando cosas de una manera que asumí que también era común para todos los demás. Con mucho entusiasmo y emoción, como lo hace una niña, compartía con mis padres las experiencias que estaba teniendo. Para mi sorpresa, constantemente y de manera enojada me dijeron que parara con esa tontería. Poco a poco me di cuenta de que otras personas no tenían estas habilidades. Mis padres se preocuparon mucho por mí y mi “imaginación demasiado entusiasta”, incluso hasta el punto de decirme que dejara de decir mentiras. Confundida con sus reacciones, finalmente dejé de compartir mis experiencias. Pensaron que había terminado con esta “tontería”. Debido a sus palabras y comportamiento, llegué a creer que mis habilidades me hacían una niña mala y por algunos años deseé que estas desaparecieran. Sin embargo, durante mis veintes llegué a aceptar que esto era una parte fundamental de lo que soy y comencé a considerarlo una dádiva.
Fue entonces cuando empecé a prestar atención. Allí me di cuenta de que no estaba sola en mi capacidad de ver y escuchar más allá de la realidad aceptada, y que habían otras personas como yo. Comencé a realizar que cuando no estaba prestando atención a lo que escuchaba, a menudo tomaba malas decisiones, y que cuando escuchaba era como si un camino iluminado se abriera y supiera exactamente qué hacer y a dónde ir.
Para entenderlo en un nivel más profundo empecé a leer tanto como pude sobre el tema.
Muchas lunas más tarde y a través de innumerables encuentros mágicos, talleres, conferencias, libros y conversaciones con personas como yo, me abrí aún más a las palabras y visiones que me dieron Mis Guías, como llegué a llamarles.
La combinación de un compromiso de toda la vida de hacer mi propio trabajo interno, años de hacer arte, y esta conexión con el más allá me hizo capaz de y me posibilitó de ser quien soy hoy, tener la vida increíble que tengo, y servir de la manera en que estoy sirviendo ahora.
Esto es lo que escribí en mi diario a principios de marzo de 2018, antes de crear las dos primeras esculturas del proyecto Luz InCorporada: “El nuevo cuerpo de trabajo está surgiendo, me mantiene despierta toda la noche con terribles dolores de cabeza. No sé por qué, pero tal vez es porque estoy recibiendo las imágenes en detalle para los Soldados de la Luz, los Soldados del Amor – ¿Carne y Espíritu = Humanos… ? Todavía no tengo claro de qué se trata.” Estas habilidades y el crecimiento continuo en vibraciones superiores a menudo vienen con molestias físicas que se manifiestan de varias maneras. Dejame decirte – ¡esto no es todo diversión y luz!
Me tomó más de 4 meses el escuchar, visualizar, meditar y trabajar en el estudio tratando de crear en 3D lo que me dijeron. La evolución fue lenta, pero los Seres de Luz InCorporada estaban surgiendo a través de la arcilla y para el 2018 el Ser 1 y el Ser 2 habían nacido.
Cuando los vi por primera vez en la fundición, en resina, quedé atónita.
Así que ahora conocés mi proceso de escuchar, ver y crear.
Al hablar abiertamente por primera vez sobre esta parte muy protegida y personal de mi vida, me siento expuesta, como si anduviera caminando desnuda por el mundo. Pero creo que esto es parte de todo este viaje: mostrarme de forma plena y auténtica. Así que aquí estoy – Carne y Espíritu – continúo creando lo que está evolucionando en una experiencia poderosa, emocionante y asombrosa.
¡Y no lo hago yo sola! Aparte del apoyo de arriba, tengo todo un equipo trabajando aquí conmigo.
Te lo cuento todo en el próximo capítulo.
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